Toxische Risiken durch Gas-Quecksilber in Energiesparlampen und Leuchtstoffröhren
Risques toxiques liés au gaz mercure dans les ampoules à faible consommation d'énergie et les tubes fluorescents
Riscos tóxicos por gás mercúrio em lâmpadas de baixa energia e tubos fluorescentes
Rischi tossici di mercurio gas a lampadine a basso consumo e tubi fluorescenti
Токсические риски по газовой ртути в низкоэнергетических ламп накаливания и люминесцентных ламп
低能灯泡和荧光灯管中的气体汞造成的有毒风险
कम ऊर्जा लाइट बल्ब और फ्लोरोसेंट ट्यूब में गैस पारा द्वारा विषाक्त जोखिम
低エネルギー電球と蛍光灯のガス水銀による有毒リスク
المخاطر السامة عن طريق الزئبق الغاز في المصابيح الكهربائية منخفضة الطاقة وأنابيب الفلورسنت
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Por ello es muy importante tener un especial cuidado en el manejo de dichas bombillas o lámparas CFL, evitando en lo posible su rotura y tambien que, al finalizar su cometido, no sean arrojadas a los contenedores de basura o vidrio comunes, sino depositadas en los lugares de recogida establecidos - puntos limpios - para que puedan ser neutralizadas o recicladas sin peligro de contaminación ambiental.
Caso de producirse la rotura accidental de una de estas lámparas, bombillas o fluorescentes, hay que adoptar de inmediato las siguientes MEDIDAS:
- Salir y alejarse del lugar, habitación, casa, etc, y, en especial, las mujeres embarazadas y los niños de corta edad para no respirar el polvo o vapores tóxicos
- Ventilar el recinto, abriendo las ventanas, durante media a una hora
- Transcurrido el periodo de ventilación, regresar solo una persona adulta y proceer a la recogida y limpieza de los residuos o fragmentos esparcidos con extremo cuidado (usar guantes desechables, lentes y macarilla o taparse la boca con un pañuelo, no pisar sobre la superdicie contaminada, no usar escobas ni aspiradoras, etc)
- Emplear pequeñas porciones de cartón, papel o cartulina, como si fueran palas, para "tomar" los fragmentos que no puedan cogerse con la mano enguantada y, finalmente limpiar el polvo o micro-partículas restantes con toallitas o papel higiénico húmedos o con trozos de cinta adhesiva.
- Limpiar, asimismo, los zapatos o calzado utilizado en la operación (especialmente las suelas)
- Introducir todos los restos, junto con los materiales empleados en la limpieza, y tambien los guantes desechables, en una o varias bolsas de plástico o frascos de cristal que puedan cerrarse herméticamente y no tengan poros o rajas.
- Poner etiquetas que indiquen el contenido tóxico
- Las alfombras, cortinas, ropas u otros objetos de difícil limpieza, que hayan sufrido el contacto con los fragmentos tóxicos, deben ser igualmente recubiertos/embalados con un plástico y cerrados con cinta adhesiva o metidos en grandes bolsas del mismo material para su eliminación correspondiente.
- Al finalizar la recogida y limpieza, la persona que ha actuado debe cambiarse de ropa y lavarse las manos o tomar una ducha
- Averiguar donde existe un "punto limpio" de recogida, llamando al Ayuntamiento o consultando Internet, y depositar las bolsas en el mismo, procurando transportarlas con cuidado (pueden servir una o varias cajas de cartón) para que no se rompan o lesionen a otras personas
Está claro que los elementos de luz CFL comportan problemas y riesgos que no sabemos si compensan o no el supuesto ahorro energético que pretenden, porque, además de sus potenciales peligros para la salud y el medio ambiente, su larga duracion no es tan larga como debería (se funden con la misna o más frecuencia que las de filamento)
Otros tipos de lámparas aconsejables que no son tóxicas:
Quizá la mejor solución alternativa podría consistir en la utilización de lámparas LED, que, aunque son algo mas caras, no continenen mercurio ni otros elementos tóxicos, y su duración y bajo consumo superan notablemente a las referidas CFL.
También carecen de mercurio, y ofrecen buenas prestaciones, las llamadas lámparas halógenas, que son de filamento incandescente de tungusteno con gas inerte que contiene halógeno.
Caso de producirse la rotura accidental de una de estas lámparas, bombillas o fluorescentes, hay que adoptar de inmediato las siguientes MEDIDAS:
- Salir y alejarse del lugar, habitación, casa, etc, y, en especial, las mujeres embarazadas y los niños de corta edad para no respirar el polvo o vapores tóxicos
- Ventilar el recinto, abriendo las ventanas, durante media a una hora
- Transcurrido el periodo de ventilación, regresar solo una persona adulta y proceer a la recogida y limpieza de los residuos o fragmentos esparcidos con extremo cuidado (usar guantes desechables, lentes y macarilla o taparse la boca con un pañuelo, no pisar sobre la superdicie contaminada, no usar escobas ni aspiradoras, etc)
- Emplear pequeñas porciones de cartón, papel o cartulina, como si fueran palas, para "tomar" los fragmentos que no puedan cogerse con la mano enguantada y, finalmente limpiar el polvo o micro-partículas restantes con toallitas o papel higiénico húmedos o con trozos de cinta adhesiva.
- Limpiar, asimismo, los zapatos o calzado utilizado en la operación (especialmente las suelas)
- Introducir todos los restos, junto con los materiales empleados en la limpieza, y tambien los guantes desechables, en una o varias bolsas de plástico o frascos de cristal que puedan cerrarse herméticamente y no tengan poros o rajas.
- Poner etiquetas que indiquen el contenido tóxico
- Las alfombras, cortinas, ropas u otros objetos de difícil limpieza, que hayan sufrido el contacto con los fragmentos tóxicos, deben ser igualmente recubiertos/embalados con un plástico y cerrados con cinta adhesiva o metidos en grandes bolsas del mismo material para su eliminación correspondiente.
- Al finalizar la recogida y limpieza, la persona que ha actuado debe cambiarse de ropa y lavarse las manos o tomar una ducha
- Averiguar donde existe un "punto limpio" de recogida, llamando al Ayuntamiento o consultando Internet, y depositar las bolsas en el mismo, procurando transportarlas con cuidado (pueden servir una o varias cajas de cartón) para que no se rompan o lesionen a otras personas
Está claro que los elementos de luz CFL comportan problemas y riesgos que no sabemos si compensan o no el supuesto ahorro energético que pretenden, porque, además de sus potenciales peligros para la salud y el medio ambiente, su larga duracion no es tan larga como debería (se funden con la misna o más frecuencia que las de filamento)
Otros tipos de lámparas aconsejables que no son tóxicas:
Quizá la mejor solución alternativa podría consistir en la utilización de lámparas LED, que, aunque son algo mas caras, no continenen mercurio ni otros elementos tóxicos, y su duración y bajo consumo superan notablemente a las referidas CFL.
También carecen de mercurio, y ofrecen buenas prestaciones, las llamadas lámparas halógenas, que son de filamento incandescente de tungusteno con gas inerte que contiene halógeno.